Lo primero que debes saber acerca de cómo funciona el buscador de Google es que éste se vale de una serie de bots o arañas para explorar Internet y así encontrar el contenido y la información que alojan los diferentes sitios web.
Como veremos más adelante, este rastreo es el primer paso para conseguir que las páginas de tu sitio web se incluyan en el índice de Google y puedan aparecer en la página de resultados de búsqueda de Google o SERP.
Ojo, es importante que seas consciente de que en materia de Posicionamiento SEO no hay garantías de cuándo se van a ver los resultados o del impacto real que una acción determinada va a tener sobre la visibilidad de la página de tu negocio online. En otras palabras, puede que todo esté bien hecho y aún así algunas páginas no sean rastreadas ni indexadas.
Fases de la búsqueda de Google
Rastreo de contenidos
Las arañas del buscador se encargan seguir los enlaces que componen la Red para así encontrar tanto las páginas que hay en internet como la información que éstas almacenan. En este punto el bot se centra en descargar texto, imágenes y videos.
¿Te has preguntado alguna vez cómo sabe el buscador de Google que una página existe? En el mundo digital no hay carteles que indiquen la dirección de una página que acaba de salir a luz y es completamente desconocida. Aquí entran en juego los enlaces que apuntan a ese nuevo sitio web. Y de ahí la importancia del link building.
Si las arañas del buscador ya han visitado la página de tu empresa será más sencillo que se rastreen e indexen sus contenidos. Y también puedes enviar un sitemap para que Google comprenda más fácilmente la estructura de tu sitio web y cuáles son sus páginas principales.
Por último, no hay que pasar por alto los errores de rastreo. Es esencial que los enlaces que conforman la estructura de tu sitio web funcionen con normalidad. Ten presente que tanto el buscador como tus clientes potenciales han de ser capaces de acceder a los productos o servicios de tu negocio sin obstáculos.
El trabajo de indexación
Durante esta segunda fase Google analiza el texto, las imágenes y los vídeos de la página y lo guarda todo en una enorme base de datos, más conocida como índice de Google. Este índice es uno de los pilares fundamentales del Posicionamiento SEO ya que las páginas que no se incluyen aquí no pueden aparecer en los resultados de búsqueda.
¿Recuerdas nuestro artículo sobre cómo optimizar imágenes a nivel SEO? Entonces ya hablamos del atributo Alt o del título de la imagen. Durante el proceso de indexación Google se fija en datos como éstos para comprender de qué tratan los recursos de nuestro sitio web y así poder almacenarlos y clasificarlos.
Al igual que existen errores de rastreo también pueden presentarse problemas con la indexación. Un contenido de baja calidad e incluso las directrices establecidas dentro del archivo robots.txt de la página pueden perjudicar la indexabilidad web.
Presentación de los resultados de búsqueda al usuario
Esta es la etapa que resulta más familiar. ¿Quién no ha hecho una búsqueda para comprar un producto u obtener información? El buscador de Google echa un vistazo a todas las páginas que tiene guardadas y muestra aquellas que concuerdan mejor con la consulta y la intención de búsqueda del usuario.
Si has leído nuestro artículo acerca de la diferencia entre SEO y SEM sabrás que no se pueden manipular los resultados de búsqueda orgánica abonando una cantidad de dinero. Las campañas y los anuncios de Pago por Clic se enmarcan dentro del marketing en buscadores. Aunque pueden ser un complemento a tu estrategia SEO son independientes y funcionan de manera distinta.
En definitiva, este es el esquema general que explica cómo funciona el buscador de Google. No todas las páginas web pasan por las tres etapas de rastreo, indexación y publicación pero seguro que han tenido que superar alguna de estas fases de este